La Noticia:
Apareció en el Reforma el 9 de octubre:
Cuatro personas resultaron lesionadas por arma de fuego, luego de que un hombre desconocido disparó contra ellas, en medio de un baile… Todo ocurrió porque a un hombre no le pusieron la canción de cumbia que quería, por lo que efectuó disparos en diferentes direcciones. Eran las 3:00 horas de este lunes y la música aún sonaba en la calle, cuando de repente un hombre que se encontraba en estado de ebriedad interrumpió la celebración al grito de "pongan la canción de Los Ángeles Azules, esa que va: ¡tiene espinas el rosal...!" Agentes preventivos que atendieron la emergencia señalaron que el responsable se escapó tras efectuar los disparos, pues nunca lo complacieron con la canción que había solicitado.
Quizá el DJ (di-yei, o el cácaro) no tenía el disco correspondiente. Hace mucho que no escucho cumbias y además no tengo el gusto de conocer a Los Ángeles Azules, pero si la música pudiera juzgarse por el nombre del grupo que la toca, yo tampoco le hubiera concedido la solicitud al borrachín. Y ni para qué comentamos la letra (no sé que más se podría decir luego de la frase lapidaria: “¡tiene espinas el rosal…!” ¿Algo que rimara? ¿…para defenderse del mal? ¿…me espinaron y en vez de cortar las rosas te compré un tamal?)
Dios es bueno al no permitir que nadie muriera (si bien debe ser una tragedia para los heridos de bala en las piernas el estar fuera de las pistas de baile por un tiempo). Sabemos que hay accidentes en el mundo, que mucha gente muere atropellada o en asaltos, pero por una cumbia… Claro que se requiere cierto fanatismo para seguir de fiesta un lunes por la madrugada y quien estaba en esa fiesta donde al parecer existía suficiente alcohol, no está totalmente exento de culpa. ¡Si la misma dedicación la pusiéramos al servicio de Dios!
La reflexión obligada es: ¿En qué mundo tan superficial vivimos? ¿Un mundo donde la gente podría morir por la cumbia del rosal (¿cómo se llamará la canción?)? ¿Un mundo lleno de personas que embotan sus sentidos con alcohol y música vana?
¿Y si lo cambiamos y le damos sentido, propósito, a nuestras vidas?
El Versículo
Decidí en mi corazón agasajar mi carne con vino y, sin renunciar mi corazón a la sabiduría, entregarme a la necedad, hasta ver cuál es el bien en el que los hijos de los hombres se ocupan debajo del cielo todos los días de su vida.
Eclesiastés 2:3
¿Cuál sería lo máximo para los asistentes a la fiesta de la noticia? ¿Qué el fin de semana tuviera 5 días y que la semana de trabajo sólo dos? ¿O una fiesta perenne donde nunca falte la bebida? Malas noticias: ¡Carece de sentido! Salomón lo tuvo todo (dicen que si Bill Gates y Carlos Slim hubieran vivido en la época de Salomón, hubieran sido unos mercaderes comunes) y se dio cuenta que todo era vanidad. Hay que leer Eclesiastés para ver la conclusión a la que llegó Salomón.
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