viernes, abril 25, 2008

Sufrimiento

Es muy sencillo dar gracias cuando alguien nos hizo un regalo o nos prestó un servicio, pero resulta cuesta arriba, o incluso impensable, dar gracias por el sufrimiento. ¿No es así? Exploremos la radical idea de que el sufrimiento sirve para más de un propósito positivo en nuestras vidas.

Según el diccionario, el sufrimiento es agonía, aflicción, dolor intenso o pena. Según la Biblia es la motivación para quitar la vista de las cosas temporales para poder ver realidades eternas (Fil 3:8). Ciertamente parte del sufrimiento es causado por el pecado existente en el mundo desde la caída del hombre, pero otra parte no está relacionado al pasado, sino que podría servir para refinar a los hijos de Dios.

La clave está en que seamos capaces de entender los propósitos del sufrimiento, de lo contrario caeremos en la trampa de la amargura, el deseo de venganza y la ruptura de relaciones. He aquí una lista de motivos según los cuales Dios estaría permitiendo el sufrimiento en nuestras vidas.

1. Con el sufrimiento Dios atrae nuestra atención. De hecho no deberíamos esperar al sufrimiento para volver los ojos a Dios, pero seamos sinceros, cuando todo va bien, pocos somos capaces de entender que es Dios quien merece el mérito y no nuestras propias fuerzas y habilidades. Sólo cuando las cosas salen mal y las cargas de este mundo nos agobian, es que volvemos los ojos hacia el Creador.
Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os haré descansar. (Mat 11:28)

2. El sufrimiento nos asegura que Dios nos ama. Todo padre entiende que los castigos impuestos a los hijos son para su propio bien.
Porque el Señor al que ama, disciplina, y azota a todo el que recibe por hijo. Si soportáis la disciplina, Dios os trata como a hijos; porque ¿qué hijo es aquel a quien el padre no disciplina? (Heb 12:6-7)

3. Mediante el sufrimiento Dios conquista nuestro orgullo. Él trata de moldear en nosotros un carácter a la imagen del de Jesús y es el orgullo lo que normalmente cuesta más trabajo doblegar. El sufrimiento es a veces la única opción que le dejamos a Dios.
Pero él da mayor gracia. Por esto dice: "Dios resiste a los soberbios y da gracia a los humildes". Someteos, pues, a Dios; resistid al diablo, y huirá de vosotros. (San 4:6-7)

4. El sufrimiento es un recordatorio de nuestras debilidades y esto, irónicamente, nos hace fuertes. Esto puede ser difícil de comprender para quien está acostumbrado a ver sólo lo terrenal, pero debemos recordar que los caminos de Dios son distintos. Jesús no llegó a salvar con espadas de hierro, sino con humildad, actitud de servicio y sacrificio.
Y para que la grandeza de las revelaciones no me exaltara, me fue dado un aguijón en mi carne, un mensajero de Satanás que me abofetee, para que no me enaltezca; respecto a lo cual tres veces he rogado al Señor que lo quite de mí. Y me ha dicho: “Bástate mi gracia, porque mi poder se perfecciona en la debilidad”. Por tanto, de buena gana me gloriaré más bien en mis debilidades, para que repose sobre mí el poder de Cristo. Por lo cual, por amor a Cristo me gozo en las debilidades, en insultos, en necesidades, en persecuciones, en angustias; porque cuando soy débil, entonces soy fuerte. (2 Cor 12:7-10)

5. Por medio del sufrimiento Dios purifica nuestra fe. Así como el fuego ayuda a probar y a purificar los metales preciosos, el sufrimiento lo hace con la fe. ¿Qué tan fuerte es aquella fe que ha resistido los más duros embates, comparada con aquella que se derrumbó ante la primera prueba?
Por lo cual vosotros os alegráis, aunque ahora por un poco de tiempo, si es necesario, tengáis que ser afligidos en diversas pruebas, para que, sometida a prueba vuestra fe, mucho más preciosa que el oro (el cual, aunque perecedero, se prueba con fuego), sea hallada en alabanza, gloria y honra cuando sea manifestado Jesucristo. (1 Pe 1:6-7)

6. Con el sufrimiento Dios prueba nuestra obra. La obra que no permanece luego de cierto sufrimiento, muy probablemente está basada en fuerzas, emociones o valores humanos. Dichas obras tienen límites humanos y no pueden ser de utilidad para un plan que trasciende a lo eterno.
La obra de cada uno se hará manifiesta, porque el día la pondrá al descubierto, pues por el fuego será revelada. La obra de cada uno, sea la que sea, el fuego la probará. (1 Cor 3:13)

7. Con el sufrimiento Dios escoge nuestras amistades. Mucha gente se agolpa alrededor de la gente que prospera y tiene recursos para repartir, pero sólo los verdaderos amigos se mantienen cuando una desgracia sobreviene.
En todo tiempo ama el amigo y es como un hermano en tiempo de angustia. (Pro 17:17)

8. El sufrimiento nos capacita para consolar a otros. Quienes han sobrellevado una fuerte crisis están mejor capacitados para comprender a quienes les toca pasar por una situación semejante.
Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, Padre de misericordias y Dios de toda consolación, el cual nos consuela en todas nuestras tribulaciones, para que podamos también nosotros consolar a los que están en cualquier tribulación, por medio de la consolación con que nosotros somos consolados por Dios. Así como abundan en nosotros las aflicciones de Cristo, así abunda también por el mismo Cristo nuestra consolación. (2 Cor 1:3-5)

Y hay más propósitos: con el sufrimiento Dios nos llama al auto examen (Ap 3:19), nos motiva a clamar a él (Sal 9:12), nos da evidencia de la guerra espiritual (Efe 6:11-12), nos ayuda a reevaluar prioridades (Sal 107:17), nos llama a identificarnos con Cristo (Fil 3:10), etc.

Con tan larga lista, debemos dejar de ver al sufrimiento como una maldición y comenzar a verlo como una oportunidad, como algo que nos permita comprender la labor redentora de Jesús. Nótese que el sufrimiento no nos redime per se, no caigamos en la trampa de sentir que merecemos algo después del mismo, sino que atrae nuestra atención hacia lo que verdaderamente vale. Así que (por extraño que parezca) demos gracias a Dios por el sufrimiento.

viernes, abril 18, 2008

Evalúan en Egipto Divorcio por Celular

La Noticia:
¿Un musulmán puede repudiar a su pareja por e-mail o celular en Egipto? La ley islámica estipula que basta con anunciarlo tres veces cara a cara para que la separación tenga efecto, pero los juristas y teólogos dudan sobre extrapolar esta disposición al e-divorcio… Según la Sharia, fuente principal de inspiración del Derecho egipcio, a un musulmán le basta con anunciar tres veces su decisión de divorcio (talaq) a su esposa, cara a cara y ante testigos, para romper su unión… Ocho de cada diez veces es el hombre quien toma la iniciativa de divorciarse en Egipto. Algo que sucede una vez cada seis minutos. Al hombre no le hace ni falta acudir al tribunal, contrariamente a la mujer… En uno de los casos revelados por la prensa, una egipcia, trató de obtener la confirmación por vía judicial de su divorcio, basado en tres mensajes de texto de repudiación de su esposo… Su esposo había tratado de llamarla una vez, pero ella no contestó, por lo que acto seguido le envió tres mensajes de texto: "No has respondido a tu marido, me divorcio de ti"… Para un hombre, el correo electrónico o el mensaje de texto se han convertido en una manera de evitar una confrontación dolorosa con su esposa, pese a que, de todas formas, ésta está privada de todo recurso legal para oponerse a una repudiación unilateral e incondicional… (reforma.com)

Comentario
¿Tres mensajes de texto y el divorcio está consumado? Al establecer esta regla no parecen haber pensado en los abogados. ¿De qué viven los abogados en los países musulmanes, si el divorcio es unilateral y, hablando de finanzas, no existen los intereses?

(Editor: Pregunta si se puede repudiar a la suegra por celular)
(Autor: No creo, pero recuerda que hay que confirmar cara a cara, por aquello de los hackers)
(Editor: ¿Cara a cara con mi suegra? ¿Por quién me tomas?)

¿La tecnología moderna ayudando a la destrucción del matrimonio? De por si las tasas de divorcios están más altas que el precio del petróleo. ¿Cómo es que a alguien se le ocurre el e-divorcio, en vez de lo opuesto?

(Editor: Lo opuesto al e-divorcio es el e-matrimonio y ya existe)
(Autor: Difiero. Lo opuesto al e-divorcio es la e-conciliación. Si el matrimonio tiene conflictos, deben buscar juntos la solución)
(Editor: e-Autor, estás confundiendo a tu e-público con tanta e-cosa)
(Autor: ¡Qué e-gracioso!)

No puedo concebir que alguien se divorcie sólo porque la esposa no contestó el celular, como en el ejemplo de la noticia. Y lo peor es que esto no es exclusivo de los países musulmanes. También en occidente muchos conflictos que desembocan en divorcio iniciaron con asuntos triviales como no recoger la toalla, ensuciar el lavabo, llamar a la madre antes que al cónyuge, etc. Luego están clamando ante el juez “incompatibilidad de caracteres,” si bien al casarse juraron “compatibilidad total” ante padres, familiares, ministro y Dios.

Ya estoy escuchando los contra-argumentos: “Es que no conoces a mi marido”, “Es que tú no tienes que aguantar a mi mujer,” “Es que cambió mucho luego de la boda,” “Es que no es posible aguantar más”… No me hace falta conocer los detalles de una relación venida a menos, pero sí se que existe alguien que puede reparar aún al matrimonio más maltrecho.

Lo que dice la Biblia:
Entonces se le acercaron los fariseos [a Jesús], tentándolo y diciéndole:
-¿Está permitido al hombre repudiar a su mujer por cualquier causa? Él, respondiendo, les dijo:
-¿No habéis leído que el que los hizo al principio, "hombre y mujer los hizo", y dijo: "Por esto el hombre dejará padre y madre, y se unirá a su mujer, y los dos serán una sola carne"? Así que no son ya más dos, sino una sola carne; por tanto, lo que Dios juntó no lo separe el hombre.
(Mateo 19:3-6)

Jesús establece claramente que el divorcio no es opción. La clave está en que la pareja invite a Jesús al matrimonio. Estoy de acuerdo en que humanamente no se pueden restaurar las ofensas vertidas durante los conflictos, pero sobrenaturalmente sí. ¿Desea que su matrimonio dure? Hable con su pareja e inviten a Jesús. Él sí puede.

miércoles, abril 09, 2008

Oreja por Oreja

La Noticia:
El alcalde de la chilena Isla de Pascua… sostuvo que el turista finlandés que cortó una oreja de un moai para llevarla de recuerdo debiera sufrir la misma pena… "Oreja que se corta, oreja que se corta. Mano que se corta, mano que se corta. Entonces ojo por ojo, diente por diente, esa sería mi justicia", dijo el alcalde desde la isla, quien forma parte de la comunidad nativa rapanui… Los moais, estatuas de piedra volcánica de varias toneladas de peso, son monumentos nacionales, por lo que el turista fue detenido… En una carta pública, el turista expresó su arrepentimiento por la acción cometida y pidió disculpas a las autoridades y a los habitantes de la distante posesión chilena. El daño provocado, sin embargo, parecer ser irreversible pues el trozo de la oreja derecha desprendida se fracturó en varios pedazos… El moai forma parte de una serie instalada en la playa de Anakena, y fueron construidos hace varios siglos por habitantes originarios de la isla… (reforma.com)

Comentario:
Primero una ideas irrelevantes e irreverentes. El tamaño de la oreja, ¿no influye? Me parece importante porque yo soy muy orejón y siento empatía por este pobre turista esperando que le corten la oreja. Menos mal que no se le ocurrió tratar de llevarse la nariz u otra parte más… vital. El material de que está hecha la oreja, ¿no tiene nada que ver? Porque entonces siguiendo la ley al pie de la letra sería: ojo de lince por ojo de lince, y no, oreja de piedra por oreja de burro, por decir un ejemplo. Así, el turista podría defenderse prometiendo construir una estatua similar y permitir luego el corte. Se alegará que una estatua construida ahora no tiene el valor de la otra, pero se puede contra-alegar diciendo que basta con dejarla reposar algunos siglos antes de amputarle la oreja.

Por supuesto que me indigna el daño al patrimonio de una cultura, ya que a final de cuentas es daño al patrimonio de la humanidad, pero no concibo el sufrimiento humano como menos importante que lo otro. Este turista se merece un tiempo en prisión o cubrir tiempo de trabajo social para aprender a respetar, pero no daño físico.

Es cierto que la famosa “Ley del Ojo por Ojo” es bíblica, pero es parte de la Ley que nadie es capaz de cumplir, la que nos hace concientes de que necesitamos redención.

Ojo por ojo, diente por diente, mano por mano, pie por pie, quemadura por quemadura, herida por herida, golpe por golpe (Éxodo 21:24-25).

Los Diez Mandamientos fueron expresados en el capítulo anterior de Éxodo (Vea Éxodo 20). Cumplirlos, junto con las demandas de los capítulos subsiguientes, está fuera de la capacidad humana. Fue por esto que llegó Jesús y nos dio libertad de la Ley. Bajo la gracia, el “ojo por ojo” pierde sentido.

Lo que dice la Biblia:
Y uno de ellos hirió a un siervo del sumo sacerdote, y le cortó la oreja derecha. Entonces respondiendo Jesús, dijo: Basta ya; dejad. Y tocando su oreja, le sanó. (Lucas 22:50-51)

Así como Jesús sanó a quien había de llevarlo prisionero a su muerte, así debemos tratar a quien nos trata mal. Jesús tenía el poder de regresar golpe por golpe (y le dieron muchos), pero Él traía un mensaje de amor.

viernes, abril 04, 2008

Muerto Movió un Pie y una Mano

La Noticia:
Cuatro meses después de que lo dieran por muerto y los médicos estuvieran a punto de extirparle los órganos para donarlos, Zach Dunlap dice que se siente “bastante bien’’… Dunlap fue declarado muerto… en un hospital de Wichita Falls, Texas, después de sufrir un accidente de auto… Su familia aprobó la donación de sus órganos. Pero en momentos que sus familiares se despedían, el hombre que creían muerto movió un pie y una mano… Reaccionó al roce de una navaja sobre la planta del pie y a la presión aplicada con una uña… Después de 48 días en el hospital, le dieron el alta y pudo regresar a su casa, donde continúa su recuperación… “Me siento bastante bien, pero es duro… no tengo paciencia’’, dijo. Dunlap, de 21 años, dijo que no recuerda el accidente… Pero sí recuerda escuchar la voz de los médicos que lo declararon muerto… En conclusión, dijo: “Sólo los buenos mueren jóvenes, por eso no me tocó”… (reforma.com)

Comentario:
“Reaccionó al roce de una navaja sobre la planta del pie…” No es el primer caso de alguien que resucita, aunque quizás el primero que lo hace por tener cosquillas en el pie. Yo no se si la ciencia médica debería incorporar esta técnica como procedimiento para declarar a una persona efectivamente muerta. Al menos yo voy a pedir que me lo apliquen, aunque sólo sea para intentar reírme una última vez.

Ya en serio, supongo que fue una verdadera impresión para sus familiares: el accidente, la noticia de la muerte de Zach, autorizar la donación de órganos y repentinamente, su resurrección. Cada uno de estos aspectos merecería un comentario, pero quiero quedarme con lo que dijo a la prensa. Primero, que escuchó a los médicos declararlo muerto. Si es sincero, eso me hace pensar que su espíritu estaba vivo, en tanto que, si los médicos saben su negocio, su cuerpo estaba muerto. No menciona luces, túneles, ángeles u otros elementos descritos por otras personas que mueren y regresan. Sin embargo, no es tan importante saber cómo va a ser “allá,” sino entender que va a haber un “allá”.

Segundo y que me pareció suficiente para seleccionar la noticia, su declaración acerca de que “sólo los buenos mueren jóvenes, por eso no me tocó”. En otras palabras, no estaba preparado, quizás como una gran mayoría de la gente que utiliza autos o se expone de una u otra forma a un posible accidente. Para la gran mayoría de la gente, sin embargo, lo común es quedarse muerto, no resucitar. Este es un caso en millones. ¿Por qué? Dios tenía quizás algo pensado para Zach, o fue muy afortunado, o recibió una dosis de extra misericordia. Tal vez nunca sepamos el motivo atrás del milagro. Pero si captamos la enseñanza de estar preparados, de hecho su resurrección ya tuvo una razón de ser.

¿Estamos preparados? No se trata de “ser buenos,” como dice Zach, sino de aceptar por fe la redención de Jesús. No sabemos cuándo un accidente automovilístico nos va a tocar y por supuesto, es mejor que no contemos con ser resucitados con cosquillas en el pie. No es lo común. Pongámonos a cuentas con Dios hoy mismo arrepintiéndonos de lo malo que hemos hecho, aceptemos a Jesús como nuestro Señor y Salvador y caminemos en paz.

Lo que dice la Biblia:
Le dijo Jesús: Yo soy la resurrección y la vida; el que cree en mí, aunque esté muerto, vivirá. Y todo aquel que vive y cree en mí, no morirá eternamente. ¿Crees esto? (Juan 11:25-26)

Jesús lo dijo claramente e igualmente clara y directa es su pregunta: “¿Crees esto?”. Así como a Marta en su momento, en tanto estamos vivos, hoy la debemos contestar.